Algo que puedo hacer Hoy: Elegir la fe por encima del temor
Serie: Bajo su sombra: las demandas de Dios en el Salmo 91
🎙️ Episodio 4 – Rechazar el temor
Lectura bíblica:
“No temerás el terror nocturno, ni saeta que vuele de día, ni pestilencia que ande en oscuridad, ni mortandad que en medio del día destruya.” (Salmo 91:5-6, RVR1960)
El miedo es uno de los sentimientos más universales y paralizantes que existen. Tememos perder la salud, la seguridad, los seres queridos, el futuro… Y aun los creyentes más maduros pueden batallar contra el temor. El salmista declara con firmeza: “No temerás…”. No porque las amenazas no existan, sino porque el que confía y permanece en fidelidad bajo las alas de Dios puede vivir sin miedo paralizante.
Esta es la cuarta demanda del Salmo 91: rechazar el temor y confiar en la soberanía de Dios por encima de las circunstancias visibles.
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El miedo nocturno y diurno: lo visible e invisible
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El texto menciona terrores de noche y saetas de día. Es decir, Dios cubre tanto lo que desconocemos (peligros ocultos) como lo que enfrentamos abiertamente (ataques visibles).
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Isaías 41:10 nos recuerda: “No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.”
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La demanda es clara: reconocer que su presencia es más fuerte que cualquier amenaza.
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La pestilencia y la mortandad: realidades que estremecen
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El salmista no niega la existencia de pestes y mortandad; las reconoce como realidades que golpean al mundo.
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Jesús mismo dijo en Juan 16:33: “En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.”
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El creyente no vive en negación, sino en la confianza de que Dios tiene la última palabra sobre la vida y la muerte.
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El temor como arma del enemigo
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El miedo es una de las herramientas más efectivas de Satanás para debilitarnos y desenfocarnos de Dios.
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2 Timoteo 1:7 afirma: “Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.”
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Rechazar el temor es afirmar que Dios reina en nuestro corazón más que las amenazas externas.
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La fe como respuesta al temor
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La confianza no es ausencia de problemas, sino la decisión de creer que Dios está por encima de ellos.
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Salmo 56:3-4: “En el día que temo, yo en ti confío. En Dios alabaré su palabra; en Dios he confiado; no temeré; ¿qué puede hacerme el hombre?”
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La verdadera fe expulsa el temor porque nos recuerda que nuestra vida está en manos del Soberano.
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Algo que puedes hacer Hoy
👉 Para el creyente: No niegues que el temor existe, pero no lo alimentes. Llénate de la Palabra y de oración, recordando que Cristo ya venció el mundo.
👉 Para el no creyente: El miedo a la muerte y al futuro seguirá siendo un tormento mientras vivas lejos de Dios. Solo en Cristo hay victoria sobre el pecado y la muerte.
Preguntas de autoevaluación
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¿Qué temores me están robando la paz y desenfocando de Dios?
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¿Me refugio en la soberanía de Dios o vivo esclavo de la ansiedad?
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¿Estoy permitiendo que el miedo me paralice o lo estoy enfrentando en oración y fe?
Oración
“Señor, reconozco mis temores y los entrego en tus manos. Ayúdame a confiar en tu soberanía, a creer que tú estás conmigo en todo momento. Recuérdame que en Cristo ya tengo victoria y que no debo vivir esclavo del miedo. Amén.”
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